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Este mes de junio, tuve la increíble oportunidad de regresar a Oslo, Noruega, por octava vez, para realizar una serie de conciertos con la talentosa banda Kesh. Del 12 al 15, llevamos música irlandesa llena de energía a la vibrante ciudad, tocando cuatro espectáculos inolvidables en The Dubliner Folk Pub. Este lugar, conocido por su ambiente animado y su aprecio por la música folk, fue el escenario perfecto para nuestras actuaciones.

Como siempre, toqué la gaita y los silbatos irlandeses, agregando ese sonido irlandés distintivo a nuestros sets. James Walsh, nuestro carismático cantante y guitarrista, cautivó a la audiencia con su voz conmovedora y su forma dinámica de tocar la guitarra. James Fleming proporcionó la columna vertebral rítmica con su bajo y su voz armonizadora, mientras que Fergal McCarthy mantuvo vivos los ritmos con sus excepcionales habilidades con la batería. Juntos, creamos una experiencia musical mágica que resonó en la multitud de Oslo.
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Nuestro tiempo en The Dubliner Folk Pub estuvo lleno de energía y entusiasmo, mientras tocábamos melodías irlandesas de ritmo rápido que hicieron bailar y cantar a todos. La camaradería y la pasión dentro de la banda eran palpables, y se tradujeron en una atmósfera electrizante que hizo que cada concierto fuera memorable. La cálida recepción del público y el ambiente acogedor del pub lo convirtieron en un momento destacado de nuestro viaje musical.
Esta no fue mi primera vez en Oslo este año. Solo dos meses antes, tuve el placer de tocar con otra banda fantástica, The Sham Rocks. Ese viaje también fue un gran éxito, consolidando aún más mi amor por esta ciudad y su aprecio por la música irlandesa.

Estoy ansioso por volver a Oslo el año que viene. El encanto de la ciudad, la calidez de su gente y la alegría de compartir nuestra música en un entorno tan acogedor hacen que cada visita sea especial. Hasta entonces, atesoraré los recuerdos y trabajaré en nuevas melodías para llevar de regreso a esta maravillosa ciudad. Gracias, Oslo, por tu increíble apoyo y entusiasmo. ¡Nos vemos el año que viene!